Esta fotografía fue tomada la última vez que estuve en París, una de esas ciudades en las que nunca me cansaría de estar.
En la fotografía aparecen los jardines de la Tullerías, que ubicados junto al Museo del Louvre son el pulmón y el lugar de reunión de muchos parisinos. Al fondo, aparecen dos de los monumentos más reconocidos de París: el obelisco de la Plaza de la Concordia y el Arco del Triunfo.
Aunque la fotografía tenga un cierto aire de postal, lo cierto es que me gusta porque está tomada en un momento del día en que para mi gusto los colores del cielo son preciosos.
Estoy de acuerdo contigo en dos cosas: yo tampoco me cansaría de estar en París y la hora del atardecer ofrece una luz insustituible de colores muy particulares. Además, me ha gustado mucho la foto.
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